En España, en la edad moderna, surge una
transformación del concepto político del poder, considerándose al Estado como
un ente con personalidad propia distinta del monarca (no era así antes del
siglo XVIII) cuyas actuaciones se encuentran dirigidas a la obtención del bien
común, lo que era conocido como res
publica.
El poder deriva de Dios y se deposita en el pueblo
que lo delega en un príncipe o soberano el cual se ve limitado por la obtención
del bien común. Dicho límite lo establece la Constitución o leyes fundamentales
del reino.
La forma de gobierno de la España Moderna fue la
monarquía. Dicha monarquía no se estableció bajo un concepto pacífico, todo lo
contrario. Con el matrimonio de los Reyes Católicos, la península se encuentra
dividida en dos coronas: Castilla y Aragón. Los soberanos lo son de cada
territorio independiente al conservar estos su personalidad jurídico-política,
no se produce esa unidad territorial. Se extienden las instituciones
castellanas al resto de territorios potenciando la voluntad independentista del
resto de territorios, generando con ello diversas rebeliones. Los naturales de
los distintos reinos seguían considerándose extranjeros entre sí, no teniendo
en común más que ser súbditos de un mismo rey.
Los Decretos
de Nueva Planta abolían las instituciones político-administrativas de los
territorios de la Corona de Aragón, que pasan a organizarse bajo el modelo
castellano.
La monarquía es hereditaria, siguiéndose en la
sucesión las reglas de las Partidas,
siendo sucesor en primer lugar el primogénito del Rey, después, los hijos del
primogénito. A falta de hijos, heredan las hijas y a falta de descendientes el
pariente más próximo. La línea recta desplaza la colateral, el masculino al
femenino, la mayor edad a la menor a igualdad. Con la Ley Sálica (Felipe V) se antepone el derecho de todos los varones a
las hembras, es decir, se establece la sucesión por línea masculina directa y a
falta de esta la colateral. Mediante pragmática sanción de Carlos IV, se
restablece el sistema de las Partidas.
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